jueves, 30 de diciembre de 2010

FELIZ 2011

Ya pediste tu deseo de Año Nuevo.?
Falta poco... yo pedí para ti:
 
Amor
 
 
Paz
 
 
Y mucha, pero mucha Felicidad!!!
 
Feliz año nuevo 2011

martes, 21 de diciembre de 2010

CUENTO DE NAVIDAD

Ray Bradbury
El día siguiente sería Navidad y, mientras los tres se dirigían a la estación de naves espaciales, el padre y la madre estaban preocupados. Era el primer vuelo que el niño realizaría por el espacio, su primer viaje en cohete, y deseaban que fuera lo más agradable posible. Cuando en la aduana les obligaron a dejar el regalo porque pasaba unos pocos kilos del peso máximo permitido y el arbolito con sus hermosas velas blancas, sintieron que les quitaban algo muy importante para celebrar esa fiesta. El niño esperaba a sus padres en la terminal. Cuando estos llegaron, murmuraban algo contra los oficiales interplanetarios.
-- ¿Qué haremos?
-- Nada, ¿qué podemos hacer?
-- ¡Al niño le hacía tanta ilusión el árbol!
La sirena aulló, y los pasajeros fueron hacia el cohete de Marte. La madre y el padre fueron los últimos en entrar. El niño iba entre ellos, pálido y silencioso.
-- Ya se me ocurrirá algo --dijo el padre.
-- ¿Qué...? --preguntó el niño.
El cohete despegó y se lanzó hacia arriba al espacio oscuro. Lanzó una estela de fuego y dejó atrás la Tierra, un 24 de diciembre de 2052, para dirigirse a un lugar donde no había tiempo, donde no había meses, ni años, ni horas. Los pasajeros durmieron durante el resto del primer "día". Cerca de medianoche, hora terráquea según sus relojes neyorquinos, el niño despertó y dijo:
-- Quiero mirar por el ojo de buey.
-- Todavía no --dijo el padre--. Más tarde.
-- Quiero ver dónde estamos y a dónde vamos.
-- Espera un poco --dijo el padre.
El padre había estado despierto, volviéndose a un lado y a otro, pensando en la fiesta de Navidad, en los regalos y en el árbol con sus velas blancas que había tenido que dejar en la aduana. Al fin creyó haber encontrado una idea que, si daba resultado, haría que el viaje fuera feliz y maravilloso.
-- Hijo mío --dijo--, dentro de medía hora será Navidad.
La madre lo miró consternada; había esperado que de algún modo el niño lo olvidaría. El rostro del pequeño se iluminó; le temblaron los labios.
-- Sí, ya lo sé. ¿Tendré un regalo? ¿Tendré un árbol? Me lo prometisteis.
-- Sí, sí. todo eso y mucho más --dijo el padre.
-- Pero... --empezó a decir la madre.
-- Sí --dijo el padre--. Sí, de veras. Todo eso y más, mucho más. Perdón, un momento. Vuelvo pronto.
Los dejó solos unos veinte minutos. Cuando regresó, sonreía.
-- Ya es casi la hora.
-- ¿Puedo tener un reloj? --preguntó el niño.
Le dieron el reloj, y el niño lo sostuvo entre los dedos: un resto del tiempo arrastrado por el fuego, el silencio y el momento insensible.
-- ¡Navidad! ¡Ya es Navidad! ¿Dónde está mi regalo?
-- Ven, vamos a verlo --dijo el padre, y tomó al niño de la mano.
Salieron de la cabina, cruzaron el pasillo y subieron por una rampa. La madre los seguía.
-- No entiendo.
-- Ya lo entenderás --dijo el padre--. Hemos llegado.
Se detuvieron frente a una puerta cerrada que daba a una cabina. El padre llamó tres veces y luego dos, empleando un código. La puerta se abrió, llegó luz desde la cabina, y se oyó un murmullo de voces.
-- Entra, hijo.
-- Está oscuro.
-- No tengas miedo, te llevaré de la mano. Entra, mamá.
Entraron en el cuarto y la puerta se cerró; el cuarto realmente estaba muy oscuro. Ante ellos se abría un inmenso ojo de vidrio, el ojo de buey, una ventana de metro y medio de alto por dos de ancho, por la cual podían ver el espacio. el niño se quedó sin aliento, maravillado. Detrás, el padre y la madre contemplaron el espectáculo, y entonces, en la oscuridad del cuarto, varias personas se pusieron a cantar.
-- Feliz Navidad, hijo --dijo el padre.
Resonaron los viejos y familiares villancicos; el niño avanzó lentamente y aplastó la nariz contra el frío vidrio del ojo de buey. Y allí se quedó largo rato, simplemente mirando el espacio, la noche profunda y el resplandor, el resplandor de cien mil millones de maravillosas velas blancas. 

domingo, 12 de diciembre de 2010

Poesia

                                              
             Soy una rosa, eres mis espinas
Agarrandose a mi , protegiendome.



Soy el sol, eres mis rayos
Que me ayudan a brillar y ser todo lo que puedo ser.

Soy un lago, y eres mi agua
Llenandome de ideas, sueños,
Y las esperanzas para el futuro.
 
  

 Soy un arbol y tu eres mis hojas
Compartiendo quien y lo que soy
Y transformando una parte importante de mi vida.
  

 Soy un corazon, y tu eres mis latidos
Latiendo ritmicamente hacia mi felicidad,
Mi miedo, mi tristeza, mi emocion.
  
Yo soy yo, y tu estas conmigo,
Para compartir todo lo que soy,
Para compartir la vida,  la amistad,
el amor, y la felicidad siempre.
 

lunes, 6 de diciembre de 2010

LA RAZON DE LA POESIA.

Cuando un poeta busca palabras al vuelo,
sabiendo que yacen, en una musa acuesta.
Poemas pautados por un designio,
razón de todo lo que ya está escrito.
Preguntando al viento el significado.
La razón del poema y el poeta,
la virtud del poeta y la poesía.
Si la letra ha de construirla en armonía,
sin duda eso te dirá que es poesía.
Pero no tan solo la letra es poesía,
un susurro imperceptible al oído,
un chasquido de tus dedos al vacio,
la inocencia de tímida sonrisa.
Poesía es encontrar pureza en las palabras,
hallar melodía en los escritos,
rosar entre lo santo y lo prohibido,
la dulzura entre lo más amargo y lo agrio,
Poesía es perdonar una traición,
amar al anónimo incomprendido,
surcar los torrentes por una causa noble,
llegar a puerto, sin siquiera haber partido.
Poesía es el rocio en tu suave piel,
la frescura de un pétalo sobre tus pechos,
una cristalina lágrima brillando en tu ojo,
o una migaja en la comisura de tu boca.
Poesía es la nieve del invierno,
la regocijante calidez de tu cuerpo,
la chispa saliendo de un leño,
la tenue bruma de tu aliento.
Poesía es la briza de estación en flor,
el aroma azucarado de sus mañanas,
el tinte escarlata texturando al alba,
el trinar de las aves enramadas.
Poesía es el perfume del té en tu tasa,
apareando nuestros torsos en una manta,
la cálida humedad de tu espalda,
y en penumbra percibir tu mirada.
Poesía es y será la creación misma,
respirar aire puro con alegría,
escuchar sinfonías de los hechos,
saborear el néctar de la vida.
tocar cielo y tierra al mismo tiempo.
Al igual que el amor se compara con amor,
al igual que la vida es la vida misma,
la poesía es simplemente…

                                  Poesía.

lunes, 29 de noviembre de 2010

F.C. Barcelona - Real Madrid: Ver el partido paralizará el país

En juego, nada más y nada menos, que el liderato de Primera División, pero sobre todo, el honor de ganar al eterno rival. Lo cierto es que, en los últimos años, no se había podido ver un derbi entre Barça y Madrid tan equitativo como el de la presente campaña. El conjunto blanco parece que esta temporada sí está preparado para plantar cara al F.C. Barcelona.

El técnico del conjunto culé, Pep Guardiola, ya ha dicho que el ambiente que está rodenando a estas horas previas al partido, se asemeja mucho al del año pasado cuando tocaba recibir en Champions al Inter de Milán, que por entonces entrenaba José Mourinho.

Ese ambiente, a pesar de tratarse de un lunes, está siendo espectacular y todo el país mira a la ciudad condal, donde esta noche comenzará a rodar el balón con las miradas de medio punto apuntando directamente al estadio azulgrana. En toda España la actividad quedará completamente paralizada, como suele ocurrir en este tipo de partidos, pero este año, con más motivos.


        

jueves, 25 de noviembre de 2010

Ana María Matute gana el Premio Cervantes 2010

El Premio Cervantes 2010 considerado como el premio Nobel de las letras hispanas ha sido atribuido en Madrid a la escritora española Ana María Matute, que a sus 85 años de edad tiene en su haber mas de cuarenta obras, entre novelas y relatos cortos, de reconocida calidad literaria. Ya en 2007 había obtenido el Premio Nacional de las Letras por el conjunto de su obra.
El Premio Cervantes 2010 considerado como el premio Nobel de las letras hispanas ha sido atribuido en Madrid a la escritora española Ana María Matute, que a sus 85 años de edad tiene en su haber mas de cuarenta obras, entre novelas y relatos cortos, de reconocida calidad literaria. Ya en 2007 había obtenido el Premio Nacional de las Letras por el conjunto de su obra.
La escritora española Ana María Matute ganó  este miércoles el Premio Cervantes 2010, que ha reconocido así a una autora  maestra en el arte de contar cuentos, ajena a modas literarias y amante del  bosque, lo medieval y la mirada infantil.
Ana María Matute, de 85 años de edad, se convierte así en la tercera mujer  en recibir el premio, considerado el Nobel de las letras hispanas, tras la  española María Zambrano (1988) y la poetisa cubana Dulce María Loynaz (1992),  como destacó la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, al anunciar su  nombre.
La escritora acaba de publicar un recopilatorio de su narrativa breve,  incluyendo sus famosos cuentos y artículos periodísticos, bajo el título de “La  puerta de la luna”, y prepara una nueva novela.
El premio Cervantes, dotado con 125.000 euros, ha cumplido con la norma no  escrita de ser entregado alternativamente a escritores españoles y  latinoamericanos, ya que en 2009 fue a parar al mexicano José Emilio Pacheco.
Un jurado de once personas, en el que participó el ganador del Cervantes en  2008, el español Juan Marsé, seleccionó, en seis votaciones y por mayoría, el  nombre de Matute, que en los últimos días sonaba con fuerza para hacerse con el  galardón.
En una reciente entrevista con el diario El País a propósito de la  publicación de “La puerta de la luna”, Matute afirmó que si le daban el premio  “daría saltos de alegría”, aunque no mostraba en sus declaraciones gran  esperanza en recibirlo, tras llevar años sonando como posible ganadora.
“No escribo para ganar premios, gano premios porque he escrito libros”,  afirmó entonces.
Sin embargo, Ana María Matute ha ganado muchos galardones en su extensa  carrera literaria, incluyendo el Premio Planeta en 1954 por “Pequeño Teatro” y  el Nacional de Literatura 1959 por “Los hijos muertos”. Finalista del premio  Nadal en 1947 por “Los Abel”, lo ganó en 1959 con “Primera Memoria”. También ha  obtenido el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil por “Solo un pie  descalzo”, en 1984.
En 1998 ocupó el asiento K de la Real Academia Española de la Lengua, a la  que había ingresado dos años antes y en la que fue la tercera mujer en entrar  en 300 años, tras la escritora Carmen Conde y la historiadora Carmen Iglesias.  Después llegarían la científica Margarita Salas y la escritora Soledad  Puértolas, que entró hace unos días.
Matute fue una narradora precoz: a los cuatro años, y tras estar a punto de  morir por una infección de riñón, escribió e ilustró su primer relato. Desde  entonces continuó trabajando en la literatura y con 17 años envió a la  editorial Destino su primera novela, ‘Pequeño teatro’, publicada años más tarde  tras ganar el Planeta.
De familia barcelonesa acomodada, Matute tiene un hijo, Juan Pablo, nacido  en 1954. En su obra, la infancia y la Naturaleza siempre han ocupado un  importante papel, y los cuentos, que ahora ha recopilado, son uno de los  géneros en los que mejor se ha movido la autora, que llegó a trabajar para la  editorial Destino publicando en este género.
Matute pertenece a la generación literaria de los años 50, aunque su obra,  lírica y a la vez realista, se enmarca de forma independiente, eligiendo a  veces esa mirada infantil o juvenil como forma de distanciamiento de una dura  realidad, marcada por una infancia dentro de la Guerra Civil española  (1936-1939).
Entre las obras de la escritora barcelonesa destacan, además de las  mencionadas, “Luciérnagas” (1993), “Olvidado rey Gudú” (1996), “Aranmanoth”  (2000) o “Paraíso inhabitado” (2008), la que aseguró que sería su última  novela, aunque de nuevo está “madurando” una nueva historia.
Prestigioso galardón en las letras hispanas, el Cervantes ha ido a parar en  años anteriores a autores como el español Juan Marsé, que lo ganó en 2008, el  argentino Juan Gelman (2007), Jorge Guillén (1976, en su primera edición),el Cubano Alejo Carpentier (1977),  el  argentino Octavio Paz (1981), el español Francisco Ayala (1991) o el último  Premio Nobel de Literatura, el peruano Mario Vargas Llosa (1994).
El premio Cervantes, concedido por el Ministerio de Cultura anualmente, no  puede ser dividido, ni declarado desierto, ni concedido a título póstumo.
Matute recibirá el 23 de abril de 2011 el premio de manos del rey Juan  Carlos I en una ceremonia en la localidad madrileña de Alcalá de Henares, cuna  del autor de “El Quijote”.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Día Universal del Niño

El día 20 de noviembre ha quedado institucionalizado como Día Internacional
de los Derechos del Niño
, o Día Universal de la Infancia. Es una fecha que nos hace recordar que un niño no es solamente un ser frágil que necesita que se le proteja, sino también una persona que tiene el derecho a ser educado, cuidado y protegido dondequiera que haya nacido.

Es más, un niño es una persona que tiene el derecho a divertirse, a aprender y a expresarse. Todos los niños tienen el derecho de ir a la escuela, a recibir cuidados médicos, y a alimentarse para garantizar su desarrollo en todos los aspectos.

Derecho de los niños
"Convenir" significa estar de acuerdo acerca de algo y tomar una responsabilidad ante lo que se "conviene". La Convención de los Derechos del Niño es un conjunto de normas acordadas que deben respetar todos los países que la firmaron y ratificaron.

Adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de noviembre de 1989, los artículos de esta Convención proponen nuevos aportes a los contenidos en la Declaración de los Derechos del Niño de 1959, y fundamentalmente avanza en el aspecto jurídico, al hacer a los Estados firmantes "jurídicamente" responsables de su cumplimiento.

Todos tenemos que crecer

Este lema de la Comunidad de Madrid pretende provocar: por un lado, una reflexión en el adulto para que perciba que tiene algo que cambiar en su forma de ser o comportarse; y por otro lado, se expone la posición crítica de la infancia para que no dé por "normales o buenos" ciertos comportamientos sociales. En otras palabras pretende hacer patente que, para que los niños puedan crecer bien, los mayores tienen algo que hacer, tienen que cambiar...¡También tienen que crecer!

"Todos tenemos que crecer" propone lemas básicos como:
- Implicar a todos, infancia, adolescencia, juventud, adultos y mayores en este compromiso y acontecimientos.
- Extender esta conciencia al mayor número posible de personas en la sociedad.
- Compartir la filosofía del lema y exigir más cumplimiento de la Convención.
- Hacer manifiesto que todos estamos en un necesario y permanente proceso de cambio, crecimiento y maduración personal y social.
- Dejar claro que siempre se necesita cambiar algo, que debemos buscar siempre el crecimiento y rehacer planteamientos de forma permanente.
- Provocar la reflexión en el mundo infantil y en el adulto, pero desde los ojos de las niñas y de los niños sobre situaciones o prejuicios que no son acordes con los Derechos Infantiles ni con los Derechos Humanos.